miércoles, 25 de marzo de 2009

The States United of Leland P. Fritzgerald


Cuando digo que no me acuerdo de ese día, no miento. Ojala pudiera acordarme, pero no. Al menos no recuerdo las cosas que ellos quieren.


Puede que ahora tenga sentido. Puede que en alguna parte entre todo esto haya alguna razón. Puede que en alguna parte de todo haya un porqué. Puede que en alguna parte este aquello que te permita que lo envuelvas todo, le pongas un lacito y lo entierres en el jardín de atrás. Que lo entierres tan hondo como si nunca hubiera pasado.


Pero nada… ni un porqué, ni enfadarse, ni decir que lo sientes, ni oraciones, ni lágrimas. Nada puede hacer que algo que haya pasado, no haya pasado.

- No puedes borrar lo que ha pasado pero nadie puede hacerlo y saber que lo que hiciste estuvo mal, no significa que renunciar a tu vida esté bien.
- ¿Tu sabes que lo siento, verdad?
- Si, sé que lo sientes.
- Ya sé que no cambia nada, pero…lo siento.



Lo peor es saber que hay bondad en las personas, aunque en general esté enterrada en las profundidades. A lo mejor no tenemos ningún dios porque nos asustan las cosas malas o puede que lo que nos asuste sean las cosas buenas. Porque si no hay un dios, eso significaría que está dentro de nosotros y podríamos ser buenos siempre, si quisiéramos y cuando hiciéramos cosas malas sería porque querríamos hacerlas o porque tendríamos que hacerlas. O quizá solo necesitamos las cosas malas para recordarnos cuales son las buenas.

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